Cómo reparar una caja de cambios

La caja de cambios del vehículo es la encargada de transmitir determinada fuerza desde el motor a las ruedas. Gracias a ella, se puede pasar de un vehículo parado a uno en marcha. Y se puede regular la potencia para vencer determinadas resistencias al avance.

Pero si se estropea, todo el coche quedará parado. Normalmente habrá que cambiarla, pero en algunos casos se puede arreglar. En este post te contamos cómo reparar una caja de cambios.

Los problemas que puede presentar una caja de cambios

Generalmente, las cajas de cambios suelen tener la misma vida útil del vehículo. Y solo en casos excepcionales se estropean. Por ello, es necesario pasar las revisiones pertinentes del vehículo. Y conducir de manera adecuada metiendo cada una de las marchas de manera suave.

Es conveniente no forzar los cambios. Y mantener todo el sistema bien lubricado por medio del uso de un buen aceite. También habrá que cambiar éste cuando lo necesite el vehículo.

Pues será esencial para el buen funcionamiento de la caja de cambios. Y para evitar una avería en el coche mayor. Pero, aun así, hay veces en las que ésta se estropea. Ya que la caja de cambios es todo un complejo sistema de piñones, bolillos, engranajes, etc.

Y es conveniente saber detectar las posibles averías ante las que nos podemos encontrar. En concreto, las que afectan a las cajas de cambios manuales, y a las cajas de cambios automáticas. Nosotros nos vamos a centrar en las manuales

Cómo saber si una caja de cambios manual está estropeada

En el caso de las cajas de cambios manuales, hay ciertos indicios que nos avisarán de que algo está fallando. Entre ellos:

  1. Ruido al intentar meter una marcha

Si al querer meter una marcha o cambiar a otra notamos un ruido fuerte. Es muy posible que la caja de cambios este desajustada con respecto al embrague. En este caso, habrá que tensar el cable que las une y ajustar todo el mecanismo. Pero también puede ser que sea necesario sustituir alguno de los anillos que van dentro de la caja.

  1. Dificultad para meter o cambiar una marcha

Si, además, también te cuesta meter una marcha y se queda atascada. Entonces nos encontramos con un posible desgaste de los bolillos que bloquean cada una de las marchas.

Si esto ocurre, habrá que sustituir los bolillos pues nos podemos encontrar con un bloqueo de marcha en carretera.

Herramientas para reparar la caja de cambios de un vehículo

En el caso de que la caja de cambios de tu vehículo presente alguno de los fallos que te hemos indicado anteriormente. Y te has animado a revisarla y repararla por ti mismo, necesitarás contar con una serie de herramientas de taller que te permitan acceder a la misma.

Y es que la caja de cambios es una caja estanca. A la que deberás acceder quitando una serie de tornillos. Por lo que necesitarás unos juegos de llaves.

Pasos para reparar una caja de cambios

Paso 1: Extrae la caja de cambios y límpiala

Para ello tienes que separarla del motor. Hazlo con cuidado para no estropear ninguna de las conexiones.

Para poder trabajar de forma segura y poder ver bien todos los componentes hay que limpiar la caja de cambios. Puedes hacerlo con agua a presión. Después sécala bien con un paño limpio o con papel.

Paso 2: Comienza a desmontar la caja

Para ello, empieza por la entrada del varillaje de la palanca de cambios. Deberás quitar tornillos y tuercas por lo que debes estar preparado con varias llaves y destornilladores. Ten en cuenta cómo estaba todo montado para poder volver a colocar cada pieza en su sitio.

Paso 3: Quita el embrague

Para seguir abriendo la caja debes desmontar la palanca del embargue. En este punto puedes observar éste también por si necesitase ser sustituido por uno nuevo.

Paso 4: Quita la tapa del primario

Quitando la tapa delantera de la caja de cambios de tu vehículo encontrarás el retén del eje primario. Límpiala bien y revisa que no presente ningún daño.

Paso 5: Quita la tapa posterior y saca el eje de entrada y de salida

Es donde se encuentra el retén del eje de salida. Ahora podrás separar las dos mitades de la caja de cambios. Es el momento de observar el estado de los rodamientos. Deberás cambiar el rodamiento en el que se asienta el eje de salida pues es el que más se desgasta.

Si los demás están en buenas condiciones no hace falta sustituirlos. Comprueba que el resto de piezas no están partidas o desgastadas. Si ves algún fallo, sustituye la pieza que esté en malas condiciones.

Paso 6: Comienza el montaje

Una vez que hayas sustituido la pieza que estaba desgastada o partida ya puedes volver a montar la caja de cambios. Recuerda poner cada una de las piezas en su sitio y cerrar la caja de nuevo con sus tornillos. Además, puedes sellar la caja con silicona para que las dos partes queden bien unidas.

Paso 7: Coloca la varilla de la palanca de cambio

Recuerda ponerla en la posición en la que la encontraste. Debes tener en cuenta la posición del varillaje con respecto a las marchas. Pues de lo contrario éstas no entrarán. Ajusta todo bien y engrasa la caja para que todos los movimientos sean suaves.